A pesar de que aún faltan horas para el gran partido, la final de la Copa del Rey entre el Real Madrid y el Barcelona ya ha generado todo tipo de controversias fuera del ámbito deportivo.
El esperado enfrentamiento, que se llevará a cabo en el Estadio La Cartuja de Sevilla, no solo ha captado la atención por el duelo entre dos de los equipos más grandes de España, sino también por las intensas discusiones y rumores que han surgido en torno a aspectos extrafutbolísticos, como la elección del árbitro, declaraciones y el clima de tensión entre los seguidores de ambos clubes.
El Real Madrid fue el club más señalado, ya que, a través de sus medios oficiales, arremetió contra Ricardo de Burgos Bengoechea y Pablo González Fuertes, ambos designados para arbitrar la gran final, debido a supuestas «hostilidades y animosidades» hacia su institución.
En ese sentido, el Atlético de Madrid se metió en las polémicas y demostró ser muy crítico con la actitud de su clásico rival.
“Esto es insoportable. Basta de manchar la imagen del fútbol español #StopAcosoArbitralYa“, expresó el club que dirige Diego Pablo Simeone, en sus redes sociales oficiales.
Incluso hubo una queja por parte de la Unión Internacional de Peñas del Atlético de Madrid. “De hecho, no deberían poder jugarla de ninguna manera, no olvidemos como le robaron la cartera al Celta en el Bernabéu“, expresaron los hinchas del colchonero.
FMZ