VARSOVIA, Polonia (AP) — Polonia y las tres naciones bálticas afirmaron el martes que quieren retirarse de una convención internacional que prohíbe las minas terrestres antipersona debido a la creciente amenaza de Rusia para los estados de la OTAN que están en primera línea.
Los ministros de Defensa de Polonia, Lituania, Letonia y Estonia dijeron en un comunicado conjunto que “recomiendan unánimemente retirarse de la Convención de Ottawa”, la convención internacional sobre la prohibición de minas antipersonales que entró en vigor en 1999.
Sostienen que la situación de seguridad a lo largo del flanco oriental de la OTAN se ha “deteriorado fundamentalmente” desde que la firma de la Convención sobre la Prohibición de Minas Antipersonales, y que “las amenazas militares a los estados miembro de la OTAN que limitan con Rusia y Bielorrusia han aumentado significativamente”.
“Con esta decisión, estamos enviando un mensaje claro: nuestros países están preparados y pueden utilizar todas las medidas necesarias para defender nuestro territorio y libertad”, escribieron.
A pesar de su intención de abandonar el tratado, afirmaron que seguirán comprometidos con el derecho humanitario, incluyendo la protección de la población civil durante los conflictos armados.
La Convención de Ottawa fue firmada en 1997 y entró en vigor dos años después. Casi tres docenas de países no se han adherido a ella, incluyendo algunos productores y usuarios clave —actuales y pasados— de minas terrestres, como Estados Unidos, China, India, Pakistán, Corea del Sur y Rusia.
En un informe publicado el año pasado por Landmine Monitor, el organismo internacional de vigilancia indicó que las minas terrestres todavía estaban siendo utilizadas activamente en 2023 y 2024 por Rusia, Myanmar, Irán y Corea del Norte.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.