La cremona es una clásica factura argentina, crujiente por fuera y suave por dentro. Con su forma de espiral y su sabor ligeramente dulce, es ideal para acompañar el mate, el café o disfrutar en cualquier momento del día. A continuación, te enseñamos cómo hacer cremona casera con ingredientes simples y pasos muy fáciles de seguir.
Ingredientes
500 g de harina 000
10 g de sal
25 g de azúcar
20 g de levadura fresca (o 7 g de levadura seca)
250 ml de agua tibia
50 g de manteca o margarina derretida (para la masa)
100 g de manteca pomada (para el hojaldrado)
Azúcar para espolvorear (opcional)
Paso a paso
1. Activar la levadura
Disolver la levadura en el agua tibia con una cucharadita de azúcar. Dejar reposar 10 minutos hasta que espume.
2. Preparar la masa
En un bol grande, mezclar la harina, la sal y el azúcar. Hacer un hueco en el centro y agregar la levadura activada y la manteca derretida. Amasar hasta obtener una masa suave y elástica (unos 10 minutos). Tapar con un paño y dejar leudar 1 hora, hasta que duplique su tamaño.
3. Estirar y hojaldrar
Desgasificar la masa y estirarla en forma de rectángulo. Untar con la manteca pomada toda la superficie. Enrollar como si fuera un pionono y luego formar un espiral, aplastándolo levemente con las manos o un palote.
4. Leudar nuevamente
Colocar la cremona sobre una placa enmantecada o con papel manteca. Dejar leudar 30 minutos más.
5. Cocinar la cremona
Hacer cortes superficiales en forma de cruz o espiga con un cuchillo afilado. Llevar al horno precalentado a 200?°C durante 20 a 25 minutos, o hasta que esté bien dorada y crujiente.
6. Servir
Opcionalmente, espolvorear con un poco de azúcar antes de hornear o al sacarla del horno. ¡Listo! Disfrutá tu cremona casera con unos buenos mates.
Consejos
Si querés una textura más hojaldrada, podés hacer pliegues adicionales con la manteca, como en la masa de croissant.
La manteca pomada debe estar blanda, pero no derretida.
Podés agregar un toque de esencia de vainilla o ralladura de limón para un sabor especial.