Harían falta cuatro autobuses para llevar a todos los comparecientes que solo en los últimos dos años han desfilado por las comisiones de investigación del Congreso y el Senado. Con ellos se podría montar un partido de futbol 7 entre ministros en activo de Pedro Sánchez y exministro del PP, con Mariano Rajoy como capitán; otro de vóley con presidentes y expresidentes autonómicos a un lado de la red y expresidentes y altos cargos del CIS al otro; una timba de mus entre los que han conocido los muros de la cárcel de Soto del Real y, al menos, media universidad con las decenas de profesores y catedráticos que han acudido a dar su opinión. En total 172 comparecencias.
Y es que, a falta de que pase el tiempo y alguien acabe recordando esta legislatura, la XV, como la ‘legislatura de la amnistía‘ o la ‘legislatura de Koldo, Ábalos y Cerdán‘, bien podría ganarse el sobrenombre de ‘la legislatura de las comisiones de investigación‘. Obviamente, es menos atractivo, pero razones no faltan. Actualmente, hay seis comisiones en marcha -cuatro en el Senado y dos en el Congreso- y otras tres a la espera de activarse. Unas cifras nunca antes vistas en las Cortes Generales.
La responsabilidad de tales números, en gran parte, recae en el PP, que ha hecho uso de su mayoría absoluta en el Senado para abrir cuantas comisiones ha deseado. La más productiva, la que investiga el ‘caso Koldo’ y cualquiera de sus ramificaciones. El PP ha convocado 79 comparecencias -hasta a 12 ministros o exministros de Sánchez- para indagar la supuesta trama dirigida por Koldo García que vendía mascarillas defectuosas durante la pandemia, el ‘Delcygate’, en las relaciones de Víctor de Aldama con la Policía, la supuesta fiesta de José Luis Ábalos en el Parador de Teruel o la corrupción de Santos Cerdán.
Sin embargo, los saltos de los conservadores de un escándalo a otro que salpica al Gobierno de coalición han ido diluyendo las posibles conclusiones de la comisión, convirtiendo este órgano en un foro en el que aprovechar la polémica del momento para acorralar al Gobierno. Eso sí, sin atreverse a citar a Sánchez. Dicen los populares que hay que esperar, que seguirán saliendo nuevas informaciones, pero omiten que podrían llamarle a comparecer todas las veces que lo deseen.
Tezanos, Mazón y el ‘cero energético’
El PP, que alega que cualquier investigación del Congreso está dirigida por el Gobierno, tiene otras tres comisiones en marcha en el Senado: sobre la gestión del CIS por parte de José Félix Tezanos, sobre la dana del 29 de octubre y el apagón del 28 de abril. La más activa de estas es la de la dana, que los populares crearon para demostrar la dejación de funciones del Gobierno central y desviar el foco del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón.
«Queremos saber la verdad y por eso hemos constituido una comisión de investigación. […] Queremos saber la verdad de todo lo que ha ocurrido y quiénes son en su caso los responsables de estas muertes«, dijo esta semana el líder popular, Alberto Núñez Feijóo, sobre los 228 fallecidos que dejó la dana. Sin embargo, en esa comisión, activada en enero, han comparecido 14 personas, todas ellas de perfil técnico, mientras que en el mismo periodo en la comisión del ‘caso Koldo’ se han celebrado más del doble de comparecencias, 33.
Por otro lado, los conservadores pusieron en marcha una comisión en septiembre de 2024 sobre Tezanos y su gestión del CIS. Desde entonces, han desfilado por el Senado 15 personas, varios expresidentes de este organismo, distintos exdirectores del departamento de Investigación del CIS y expertos en sociología. Todos ellos sin generar mucho revuelo. Y, por último, está la comisión sobre el apagón, creada en junio y que, por el momento, solo ha celebrado una comparecencia.
Promesas cumplidas y pendientes
Muy diferente es la situación del Congreso. La aritmética parlamentaria complica la capacidad de PSOE y Sumar de activar cuantas comisiones deseen. Actualmente, solo hay dos a pleno rendimiento, ambas comprometidas por el Gobierno con ERC y Junts a cambio de que hicieran presidenta a Francina Armengol: una sobre los atentados en Barcelona y Cambrils de 2017 -ahí se celebró la polémica comparecencia de Mohamed Houli Chemlal, el único terrorista superviviente de la explosión de Alcanar- y otra sobre la ‘operación Cataluña’ y el uso de recursos del Ministerio del Interior durante el gobierno de Rajoy para espiar a rivales políticos.
El expresidente del Gobierno y hasta cuatro de los que fueran ministros suyos -entre ellos el tantas veces citado exministro de Interior Jorge Fernández Díaz- han desfilado por la que es ya la cuarta investigación que realiza el Congreso en torno a la denominada ‘operación Kitchen’. Hace cuatro años, la Cámara baja ya aprobó unas conclusiones sobre este caso.
Y a la espera están las comisiones sobre la dana, ya aprobada y constituida pero que no echará a andar hasta la vuelta del verano, y otras dos idénticas -una de PSOE y Sumar y otra del PP- sobre el apagón, que fueron aprobadas por el pleno y que aún no se han activado. Los de Yolanda Díaz también piden una investigación sobre los negocios del novio de Isabel Díaz Ayuso con la empresa sanitaria Quirón y otra sobre el ‘caso Montoro’. Quien sabe si, al final de la legislatura, hay comparecientes de sobra para crear una liguilla entera de futbol.