El único detenido por la muerte de Liam Payne, Braian Paz, concedió una entrevista desde la cárcel y contó cómo fue su relación con el músico inglés. El acusado volvió a defender su inocencia y dijo que el integrante de One Direction vivía inmerso en un mundo de sexo, adicciones y soledad.
Paz dijo que se conoció con Payne en un local de Puerto Madero, donde el artista se le acercó, mostró interés en conocerlo y le pidió su Instagram frente a su novia. A partir de ahí, mantuvieron contacto a través de una cuenta y luego por iCloud.
En su declaración, dijo que el músico quería compartir drogas y buscaba compañía femenina.
El encuentro se concretó el pasado 2 de octubre y Payne le mostró temas inéditos y lo invitó a colaborar en la remasterización de un beat. Durante esa reunión, le habría confesado que se sentía solitario, le compartió un dibujo de su hijo y le ofreció un Rolex, que él rechazó. Además, afirmó que el artista insinuó su condición de bisexual bajo los efectos de las drogas.
El detenido desmintió las versiones que indican que le habría suministrado drogas al cantante, aunque admitió haber compartido una pequeña cantidad de cocaína que poseía para consumo personal.
Sobre la noche del incidente, describió un ambiente tranquilo donde compartieron whisky y Coca Cola, hablaron de proyectos artísticos y crearon canciones. En más de una oportunidad, el joven mencionó que Payne parecía «algo paranoico», que trabó la puerta de la suite y que andaba con un celular sin acceso a redes sociales.