El emblemático Estadio Azteca, escenario de algunas de las gestas más recordadas del fútbol mundial, incluido el histórico gol de Diego Maradona en el Mundial de 1986, ha cambiado de nombre. A partir de este viernes, el mítico recinto será conocido como Estadio Banorte, en virtud de un acuerdo con el banco mexicano que financiará una millonaria remodelación de la instalación.
El nuevo nombre será parte de una alianza a largo plazo con el Grupo Ollamani, propietario del estadio, que ha invertido ya una cifra significativa para actualizar el inmueble de cara a la Copa del Mundo 2026. La remodelación, que comenzó en 2024, tiene un presupuesto de 2.100 millones de pesos (alrededor de 105 millones de dólares) y busca convertir al estadio en uno de los mejores del mundo, mejorando la experiencia de los asistentes en futuros espectáculos.
El Estadio Azteca fue cerrado temporalmente desde 2024, lo que obligó a los equipos como América y Cruz Azul a jugar en sedes alternativas. Para cumplir con los requisitos de la FIFA, la remodelación se extenderá hasta 2026. En el próximo Mundial, el Estadio Banorte albergará cinco partidos, incluidos tres de fase de grupos, uno de dieciseisavos de final y otro de octavos de final.
Inaugurado en 1966, el Estadio Azteca ha sido escenario de momentos históricos, como las consagraciones de Pelé y Maradona. Su capacidad, que antes de las obras era de 81.000 personas, se incrementará a 90.000 asientos tras la remodelación.
Este cambio de nombre es el segundo en la historia del estadio: en 1997, recibió el nombre de Estadio Guillermo Cañedo, en homenaje al dirigente mexicano que impulsó los Mundiales de 1970 y 1986, pero la afición no aceptó el cambio y rápidamente retomó la denominación popular.
A pesar de este cambio de nombre, el legado del Estadio Azteca como uno de los templos más grandes del fútbol mundial sigue intacto, con su icónica historia que permanecerá en la memoria colectiva de los aficionados.