El Papa Francisco continua grave pero estable. Así lo informó el boletín médico difundido por la Oficina de Prensa de la Santa Sede la tarde del 25 de febrero, manifestó que “no se han producido episodios respiratorios agudos y los parámetros hemodinámicos permanecen estables”.
“El estado clínico del Santo Padre sigue siendo crítico pero estable. No se han producido episodios respiratorios agudos y los parámetros hemodinámicos permanecen estables», expresaron.
«Por la tarde se le ha practicado un TAC programado para el control radiológico de una neumonía bilateral. El pronóstico sigue siendo reservado. Por la mañana, tras recibir la Eucaristía, se reincorporó al trabajo”, concluyeron.